Aquel Cabrera, este Messi

Hoy a la tarde, cuando el sol ya se esté escondiendo, los palos y las pelotitas en los clubes de golf de Argentina y Uruguay descansarán tranquilos y todos los ojos se posarán sobre la televisión para ver el clásico del río de la Plata por la última fecha de las Eliminatorias para el Mundial de Sudáfrica 2010.
La selección conducida por Diego Maradona está en un momento delicado, parecido al que estuvo Ángel Cabrera en el hoyo 18 de la última vuelta del Masters de Augusta, donde sólo le servía el par para seguir con vida en el torneo, que luego ganaría.
Al igual que el “Pato” en Augusta National, donde nada más que un puñado de amigos lo alentaban, esta noche la selección argentina será visitante, ya que sólo 1.000 personas la acompañarán, mientras que a la celeste la apoyarán unos 60.000 almas que colmarán el estadio Centenario.
El equipo nacional necesita la victoria para clasificarse directamente al Mundial, pero el bajo nivel demostrado por el conjunto albiceleste en los últimos enfrentamientos hace difícil pensar en un triunfo cómodo.
Si el partido termina empatado y el combinado dirigido por Marcelo Bielsa vence o iguala con Ecuador, la Argentina también obtendrá una plaza directa, pero en caso de que los jugadores dirigidos por Sixto Vizuete logren una diferencia de 5 goles, la selección nacional deberá ir al repechaje, situación a la que también llegará si pierde y no gana Ecuador. Por otra parte, si Uruguay y Ecuador ganan, el Mundial no contará con la presencia de Lionel Messi, uno de los mejores jugadores del mundo.
Los argentinos esperan que Messi tenga una tarde-noche como la de Cabrera, quien necesitaba, ese abril, hacer dos tiros de 130 yardas para ir al hoyo 19, algo que logró tras embocar un putter de 3 metros, para luego en el desempate consagrarse campeón.